Sobre mi

María Molina

Sevilla, 1980
Siempre me he caracterizado por una personalidad creativa y toda la vida he soñado con dedicarme a pintar, pero las inseguridades de los dieciocho años me desviaron de mi pasión y dediqué mis primeros catorce años de carrera profesional a la administración de empresa, período de seguridad económica en el que formé un hogar y crié a mis hijos. El tiempo va dando tablas y decidí reinventarme profesionalmente hacia mi vocación, la ilustración. Comencé a formarme artísticamente en 2018, compatibilizándolo con otro trabajo y con las cargas familiares, en fines de semana y quitándole horas al sueño. Un máster de ilustración en “La Galería Roja” de Sevilla, un taller de acuarela con Esther Gili, un cuatrimestre de dibujo al natural en la facultad de Bellas Artes… y mucho entusiasmo autodidacta.
Mi primera exposición individual, “Tierra de Mujeres”, fue un repaso por la realidad femenina de distintas partes del mundo, acompañado de historias de superación y empoderamiento, lo que convirtí en mi sello de identidad y acabé plasmando en prendas de vestir, bajo el nombre MoLiMoL, surgido de mi alias, Moli. A su vez, me especialicé en ilustraciones grupales para clientes particulares y en retratos de todo tipo, adaptándome a perfiles más realistas y a otros más cartoon, pero siempre en un estilo vivo, colorido, contundente y con un toque naíf.

Tierra de mujeres

Borré la pintura de mis ojos y las ví. Las parí encadenadas, serenas, agitadas… Ellas ya estaban allí. Amalgama de emociones, batea de colores, que gritan, que callan. Mujeres que ya no lo sueñan, avanzan sobre pies de tierra.